La Pedriza con calentamiento

El domingo tocaba otra ruta maratoniana preparada por Magellan, rebautizado como “The Coach” a lo largo de este invierno/primavera. Datos previos de la ruta: kilómetros..., desnivel..., recorrido..., duración... solo sabíamos que se salía a las 9:00 desde el parking de la gasolinera de Manzanares el Real y habían surgido rumores de que acababa por la Pedriza. Pues, aunque os parezca mentira, en estas condiciones aparecimos otros cuatro bikers dispuestos a acompañarle.

Según nos dirigimos al punto de salida por la carretera de Colmenar la sierra se presenta con una pinta inmejorable, en un día soleado y buena temperatura, de autentico lujo para montar un poco en bici. De hecho durante el trayecto me sorprende (no mucho) que a esas horas la mayoría de la gente va con bicis en la baca, desmontadas en el asiento trasero, etc…todos equipados con el inconfundible traje de faena y por supuesto mirando de reojillo a las burras de los coches que pasaban junto a ellos.ASISTENTES
Nos reunimos 5 bikers, entre alcosanseros y pakets: Canario, Golfer, JRomero, Magellan y Rul Bierzo.

TRACK
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DATOS DE LA RUTA
Domingo 11 de abril: 71,5km, 1.900m de desnivel de subida acumulado, 6 horas y 45 minutos (5 horas dando pedales).

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MAPA DE LA RUTA





CRÓNICA
Comenzamos puntuales, con la sorpresa de la compañía de Er Canario, que como es costumbre se presenta sin avisar, y la petición de Golfer de no hacer comentarios futbolísticos, lo que se consiguió durante bastantes horas muy meritoriamente, sobre todo teniendo en cuenta que había dos sonrientes atléticos en el grupo.

Calentamos con la subida desde el embalse se Santillana para coger la pista dirección Moralzarzal, donde llegamos tas unos kilómetros planos y en perfectas condiciones. Callejeando por Moralzarzal deduzco que Magellan, mas que tener los mapas en la cabeza al estilo tomtom, quizás use un sistema de navegación similar al de las Palomas y otros animales (con materiales ferromagnéticos en la punta de algún apéndice y movidas de este tipo….), es solo una teoría. El caso es que él sabía a que punto había que llegar y callejeando unos metros nos presentamos allí en un periquete, mientras yo todavía no me había enterado ni de en que pueblo estábamos.

Aquí teníamos la segunda fase del calentamiento una rampa cortita pero con mucha pendiente y hormigonada, de forma que recordaba mucho a la subida a la Bola (pero claro, esto eran solo unos pocos metros y los otro son unos pocos kilómetros). De hecho pasada la parte hormigonada pudimos ver como una fregoneta de mantenimiento del Canal se paraba delante de una puerta y luego sufría para poder volver a ponerse en marcha, hasta pensé que nos iba a pedir que empujásemos. Después del primer rampón y quitarnos todas las prendas de abrigo para quedarnos en manga corta, empezamos la subida al telégrafo, ya más tendidita. Cada uno a su ritmo, bueno yo al de Golfer que no me quería ir solo pa’arriba, jajajajaja. Arriba las vistas de toda la sierra eran espectaculares.

En la bajada nos encontramos la primera senda del día, muy divertida, cortita y rápida aunque tiene un tramo intermedio con bastantes pedruscos donde sí es más prudente apretar un pelin el freno (pero solo el trasero, eh!). Comentamos en este punto que desaparecido el barro de los últimos meses se ha quedado el terreno muy seco y con una capita de arena suelta que no agarra mucho, así que no hay que confiarse un pelo y acostumbrarse rápido a las nuevas condiciones.

Seguimos bajando por senderos y pistas dirección Becerril y de aquí hasta la urbanización Vista Real junto a la cual hacemos un momento “barrita”. Mientras zampamos observamos los distintos métodos que tienen los compañeros bikers de abrir la cancela que estaba delante de nuestras narices: uno sin bajarse de la bici la da una patada y pasa metiéndose por el hueco (una maniobra muy ajustada, le salió bien por escasos mm, le damos un 7), otro la abre con la pierna pero luego se ayuda del brazo para pasar sin que se cierre ( mucho más elegante, un 9) , otro la abre, pasa y tira millas pero claro se empieza a cerrar mientras pasan los otros dos que venían justo detrás (sin comentarios, descalificado) …

Subimos por el sendero que va paralelo a la carretera de Navacerrada donde nos cruzamos con otro montón de bikers. Cuando llegamos al final pues nos damos la vuelta y volvemos por donde hemos venido, alguno se preguntará “y para qué coño hacen ese tramo de ida y vuelta?” pues en principio simplemente por dar un paseo en bici que es lo que queríamos hacer. Aparte yo intuyo que a Magellan le gusta esta zona porque con su peculiar estilo de bajarse de la bici en apenas cinco minutos se aberronchó contra el rocaje, la flora y la tierra de manera consecutiva (no recuerdo si fue por este orden), por cierto, todo empezó justo unos minutos después de que Rul_bierzo le preguntase si ya se había hecho a los CrankBrothers.

De aquí todo pista a favor hasta llegar por fin a la Pedriza , una vez completados los 40km de calentamiento er Canario nos dice que no tiene un día muy fino y es posible que se vuelva al coche antes de tiempo, por lo que intercambia teléfonos con Golfer al comienzo de la subida. Justo después del primer tramo de descanso hacemos una parada para comer algo, reagruparnos y ver cómo vamos de fuerzas. Todos seguimos la ascensión y el siguiente reagrupamiento será ya a solo 4km para el final de la subida, en el segundo descansillo que tiene el puerto.

En este punto es donde Golfer ve que tiene llamadas perdidas y tras unas mucho esfuerzo por falta de cobertura Magellan nos cuenta que Er Canario y él bajan a los coches por problemas físicos, así que hay que agradecer a Alfonso no solo el que prepare y nos guíe en la ruta sino el detalle de no dejar a nadie en el camino. Al Cesar lo que es del Cesar, igual que alguno se acuerda de su family cuando hace “la parada del hijo puta” y al llegar el último no le deja ni desenganchar los pies de las calas para que no se quede frió, estos otros gestos compensan con creces, no os parece? así que mi voto es a favor de que continúe en la Academia, jeje.

Desde aquí al Collado de los Pastores subida continúa, que se hace dura por la distancia acumulada y por el calor, que a las dos y media de la tarde es considerable, el sol pega de lleno y nosotros sin cremita. Al final de la subida otra llamada de Magellan a Golfer confirma que los que habían bajado a los coches habían llegado bien. Arriba parada rápida para comer todo lo que quedaba en las mochilas e iniciar el descenso. Dudábamos si hacer la bajada por pista o coger alguna de las trialeras clásicas de la zona que ninguno de los tres habíamos hecho (salvo Rul_bierzo andando), pero entonces otro grupo con pinta de "PROs" del "XC" nos preguntó si sabíamos donde había que cogerlas y decidimos que si ellos se metían pues nosotros detrás. La subida aún no había terminado para Golfer, que a los pocos metros de empezar la bajada se dio cuenta de que le faltaban las gafas y tuvo que repetir la última rampa.

Bajamos juntos hasta el desvío de la primera senda, donde Rul tira por pista porque no se ve con muchos ánimos, así que Golfer y yo nos lanzamos para abajo. Le aviso que no me tocaba practicar lo de salir por las orejas de la bici, por lo que iría a mi ritmo, para que me esperase de vez en cuando. En plena bajada le doy vueltas a que hacer estas rutas de 2000 metros de desnivel implica que también tienes 2000m de bajadas… justo en ese momento me salgo un poco de la trazada y me zampo una rama de pino con todo el careto, con lo que vuelvo a la realidad y me concentro en las curvas, piedras, raíces y demás dificultades del camino.

Comprobamos que se baja más rápido por la trialera, ya que cuando estamos en la pista a punto de lanzarnos a por la segunda nos cruzamos con Rul, que además se ha tenido que hacer algún tramo de falso llano que incluso pica un poco para arriba. En la segunda trialera adelantamos al grupito que nos habíamos encontrado en el Collado de Los Pastores, estaban arreglando un pinchazo y cuando vieron a Golfer bajando ágilmente entre las piedras rompieron en aplausos, cuando pase yo simplemente me dieron ánimos y me dijeron que no le llevaba muy lejos, me dio la sensación de que según pasaba alguno también se santiguaba y rezaba entre dientes alguna oración rogando por mi salud, que buena gente! (esto es broma, que iba tranquilito! sobretodo después de lo del pino). Nada más salir a la pista nos encontramos a un paisano con chaleco fosforito que nos acojonó un poco, pero parece que simplemente estaba controlando un poco a los coches del parking.

En total fueron unos 4km de descenso, con un desnivel de casi 500m, Mmmuuuyyy divertidos y no excesivamente técnicos, por lo que solo hubo que echar pie a tierra para superar algunos árboles cruzados en el camino. Además solo nos encontramos un par de senderistas que se apartaron gentilmente. Con la alegría de la bajada el repecho final de Canto Cochino lo pasamos como si fuese una tachuelilla.

Salimos del parque regional dejando atrás una larga cola de coches que a las 15:30 esperaban a pleno sol para aparcar dentro (no sé si esto merece la pena¿?), unas chavalas que estaban aburridas dentro del coche, seguramente excitadas todavía porque unos minutos antes había pasado por allí Rul_Bierzo, nos piropearon con aquello de “vaya cuerpaaaaazo!!”, se cree Golfer que iba por él, pero yo no estoy tan seguro porque el menda llevaba el culotte ceñido y el maillot Paket que me hace un tipazo estupendo (como a todos los miembros del grupo, dicho sea de paso y es que se se nota que ese maillot esta hecho a partir del patrón del Padre Paket). En cualquier caso no estaban nuestros cuerpos para entrar al trapo, así que seguimos pedaleando hacia los coches y los cuatro, ellas dos y nosotros dos, nos quedamos con las ganas, bueno Golfer no que ya está en otra etapa de la vida.

Al llegar al coche Rul_Bierzo ya tenía la bici empaquetada y estaba listo para partir a comer a casa. Por la hora que era ya había mucha hambre así que Golfer y servidor tiramos para el restaurante donde nos esperaban unas tapas, una jarra de cerveza con limón y un camarero desconfiado que nos hizo pagar antes de terminar por si le hacíamos un sinpa (esto no es broma, reconocido por el propio camarero ¿tan mala pinta tendríamos después de casi 7 horas sobre la bici?). Como no podía ser de otra forma también comentamos algo de rutas futuras…aunque eso... ya es otra historia...

Redactado por JRomero.
Fotos: JRomero.

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